Las medidas no tienen por qué ser exactas, pero conveniene que no falte ninún ingrediente.
Una cucharada de atracción: no sólo se trataría de atracción física, puesto que no estoy hablando única y exclusivamente de relaciones "1+1=2" (o "1+1=3" si nos descuidamos), sino de atracción de pensamiento o de actos.
Mi simple, pero no por ello menos razonable opinión es que nos acercamos a aquellos que más nos interesan, a aquellos que más nos llaman la atención o a aquellos que creemos que más se nos asemejan. No estoy de acuerdo con esa desgastada expresión "los polos opuestos se atraen", me parece una idea absurda si la sacamos del laboratorio, somos algo más complejos que la magnetita que forma un imán.
20 gramos de aceptación: que tenga un ojo más grande que otro o algo de tripita, que sea un quejica o demasiado reservado, que grite en momentos inoportunos o hable cuando sabe que no tiene que hablar, que le huelan los pies o tenga el culo gordo o, por el contrario, lo tenga "carpet"-esto es lo que me gusta de Muchachada Nui, que puedo decir mamarrachadas que sólo unos pocos entenderán- son detalles que se deben pasar por alto. Como ya he dicho antes, lo que nos atrae del otro es lo que demuestra, no lo que muestra con su belleza. Aunque si atendemos a la otra expresión "la comida entra por los ojos", mi teoría de la atracción de pensamiento se viene abajo.
100 gramos de confianza: supongo que no es necesario explicar lo que eso significa. Si no eres capaz de confiar en la otra persona la situación se convierte en un "circo de mentiras, máscaras y persecuciones".
Dos cucharaditas de admiración: una por cada paso que da esa persona y tu aplaudes, otra por cada paso que das tú siguiendo su camino.
40 mililitros de respeto: desde mi punto de vista es el ingrediente más importante para que nuestro pastel salga como queremos, no debemos apurar la cantidad empleada, ya que si es así el resultado será algo insípido.
3 gramos de apoyo: si no queremos moldear la relación hasta el punto de la farsa, lo mejor es creer en esa persona, haga lo que haga, nos guste o disguste, y ayudarla a salir de cualquier agujero en el que tropiece, nos lo pida o no.
Y por último espolvoreamos nuestro bizcocho con un poco de cariño y muestras de aprecio: de todos los colores; verbal o físico, con cuidado de no ser demasiado generosos o el bizcocho se pasará de empalagoso.
Me encanta escribir cosas aparentemente sin sentido... ¡Libertad creativaa!
2 comentarios:
Simple y llanamente, la expresión carpet, es espectacular.
Simple y llanamente, la expresión carpet, es espectacular.
Publicar un comentario